"En los tiempos previos al Coronavirus, la incorporación del eLearning a los Negocios, Escuelas e Instituciones Educativas ya crecía de manera exponencial.
Según informes del Global Market Insight, se prevé que para 2026 la industria del eLearning tendrá un valor de 375 mil millones de dólares. Como consecuencia de esto, se abrirán nuevas oportunidades tanto a empresas como a proveedores de educación pudiendo así mejorar sus cursos de eLearning".
1. Aprendizaje a través del móvil: Multitud de estudios muestran que millones de personas cada vez más eligen su dispositivo móvil para acceder a internet. Entre sus diversos usos, cada vez más usuarios, lo utilizan para consultar material de aprendizaje. Por lo que, el contenido educativo para webs, para vídeos y para diversos recursos, siempre tiene que estar pensado para su consumo a través del smartphone. Adaptar el contenido a diversos formatos es imprescindible para dar a los alumnos una mejor experiencia, dándoles así una mayor flexibilidad a la hora de acceder a los cursos.
2. Tecnología inmersa:Uno de los mayores potenciales de la tecnología inmersa es su potencial para impulsar las capacidades de aprendizaje online. Por ejemplo, la realidad aumentada permite ofrecer un aprendizaje interactivo incorporando por ordenador gráficos inteligentes con el mundo real. La realidad aumentada ofrece una tecnología que permite ofrecer una experiencia de eLearning inmersa. Y entre sus ventajas destaca su utilidad para el aprendizaje en distintas industrias, por ejemplo, mostrar situaciones peligrosas que pueden surgir en ámbitos como el de la salud.
3. Aprendizaje a través de vídeos:
El formato vídeo es el más utilizado el pasado año, desde clases, conferencias, reuniones… Una de las ventajas del aprendizaje por vídeo en streaming es la elevada interacción entre profesores y alumnos. Esta modalidad permite un aprendizaje rápido, fácil y un aumento en las tasas de retención.
4. El Big Data en el Aprendizaje:
El Big Data hace referencia al volumen de datos que una empresa recopila a diario. Sin embargo, lo importante es el valor y lo que se hace después con esos datos.
Las organizaciones educativas pueden recopilar datos de sus alumnos como sus notas, progreso, logros… Pudiendo así ofrecer un servicio más individual y obtener información sobre cómo mejorar el proceso de aprendizaje.
5. Microaprendizaje:
El microaprendizaje se trata de proporcionar a los alumnos poca cantidad de contenido digerible para que se pueda consumir más rápido, debido a su decreciente capacidad de concentración. Por lo que, este aprendizaje resulta fácil de consumir haciendo valioso cada minuto de aprendizaje y alcanzando los objetivos marcados.
Esta forma de aprender es adaptable a cualquier dispositivo, es por ello que cada vez más se pone en práctica.
6. Aprendizaje Social:
En 2016 Degrees realizó un estudio en el que decía que los trabajadores a la hora de aprender algo nuevo acuden antes a pedir ayuda a sus compañeros de trabajo que a sus jefes. La mayoría de habilidades nuevas son intercambiadas entre compañeros de trabajo, esto es algo que con el teletrabajo se puede perder.
El aprendizaje peer to peer, es fácil de manera presencial. Sin embargo, también es compatible con las clases online, pues pueden trabajar igualmente de manera colaborativa entre compañeros y adquirir nuevas habilidades.